Aprender a leer es uno de los pasos más importantes en la vida de un niño. Supone una herramienta fundamental para comunicarse y entender lo que le rodea. Por ello resulta esencial fomentar la lectura desde pequeño y que comprenda el contenido de lo que están leyendo. Cada niño tiene su proceso de aprendizaje y sus tiempos para poder adquirir esta competencia. Para conseguir ayudarles con esta etapa será muy necesario poner en marcha diferentes estrategias:
Actividades de lecturas dinámicas. Potenciar actividades en las que el alumno se sienta parte del proceso y sean de su interés. Tratar temas que despierten las ganas de participar en cada actividad y reforzar esta conducta para conseguir que el éxito de compresión se garantice.
Personalizar la lectura. No todos los alumnos adquieren el proceso de compresión al mismo tiempo por lo que será interesante personalizar cada lectura al nivel del alumno y sus necesidades. Esto facilitará que la capacidad de compresión llegue por diferentes formatos y que el alumno se sienta feliz y cómodo en el proceso.
Lecturas de refuerzo. Completar las lecturas del colegio con lecturas en casa ayudará al alumno. Hay opciones muy interesantes como aprender a leer con GEU. Estos libros se caracterizan por ser muy prácticos, incluyen actividades dinámicas que ayudan al alumno a entender lo que están leyendo.
Duración de la lectura. La actividad de lectura deberá estar asociada a la edad del alumno. En la primera etapa de inicio en la lectura, la concentración es una habilidad difícil de mantener durante un periodo largo de tiempo. Con el paso del tiempo el niño adquiere la capacidad para poder leer con más continuidad. Así, será mucho más fácil mejorar la comprensión lectora. Al leer más se potencia esta capacidad.
Niveles de lectura. Cada edad irá acompañada de un nivel de lectura diferente que le permitirá avanzar en la compresión y fortalecer esta competencia. Así, el alumno podrá ir entrando en diferentes niveles e ir a un ritmo que se adapte a sus necesidades. Esto es un paso muy importante y esencial para que el alumno entienda que es un proceso esencial en su educación, pero sin hacerlo algo tedioso y pesado. Sobre todo, cuando el niño se inicia en la lectura.
Leer en voz alta. Es el primer paso para que el niño pueda entender lo que lee, leer para uno mismo resulta un proceso más complejo, pero que irá adquiriendo poco a poco según vaya creciendo.
Evaluar. Realizar actividades luego de la lectura, será una estrategia esencial para saber si el niño ha comprendido realmente lo que ha leído. Las actividades deben estar orientadas para que el alumno pueda responder sobre cuestiones relacionadas con la trama de la lectura.
Impulsar la lectura es un proceso esencial que debe ser reforzado tanto en la escuela como en la casa, ya no se trata solo de leer, también, es muy importante que el alumno entienda y comprenda lo que lee. Tener una comprensión lectora buena ayudará en otros procesos educativos. Por ejemplo, muchos alumnos tienen dificultades con las matemáticas porque no suelen entender los enunciados. La comprensión lectora es fundamental para que el niño pueda desarrollar sus capacidades y habilidades lingüísticas.